Estirarse y mover el cuerpo un poco cada cierto tiempo en el lugar de trabajo o escuela, nos quita cansancio, oxigena y revitaliza para continuar con nuestra tarea. Es algo que deberíamos acostumbrarnos a realizar para cuidar nuestra espalda y nuestra salud. Hay ejercicios simples, que no requieren espacio y nos pueden ayudar a que la jornada sea más llevadera.
El movimiento que en este post os explico es simple, estira y da movimiento a nuestra columna revitalizándola y acompañado de la respiración nos oxigena.
Sentados en una silla (se puede realizar en el suelo con las piernas cruzadas) separa tus piernas, apoya tus manos sobre las rodillas. Inspira profundamente y haz una pequeña retención. Luego flexiona el tronco hacia delante expulsando el aire y estirando tu cuello hacia delante lo que puedas, continúa la flexión hacia el suelo. A continuación presiona con tus manos y brazos las rodillas o muslos y empieza a subir el cuerpo, con la cabeza escondida, barbilla hacia el pecho y espalda redondita, hasta que llegues a la postura inicial, donde levantas la cabeza, dejas la presión de tus manos en las rodillas y vuelves a inspirar para volver a empezar el ejercicio.
Imagina que eres un camello y que con tu respiración imitas su movimiento al andar, que estiran su cuello al dar un paso hacia delante para luego recogerlo antes de dar el siguiente paso.
Siente como tu columna, tus vertebras van movilizándose, desenganchándose, cogiendo movimiento, ductilidad, quitando entumecimiento por haber estado demasiado tiempo en una misma posición. Al mismo tiempo la musculatura de tu espalda se estira, también tus cervicales se movilizan, así como tus órganos que reciben sangre oxigenada por tu respiración. Se despeja tu mente y remueves la energía estancada.
Puedes añadir también el ejercicio que explico en unos de los primeros post de este blog que lleva el título «Un Break en tu rutina diaria«.
Om Shanti.
Marga Martin
@petitsgurús